Texto: Tanuki Yuki

Dicho esto, puedo respirar y tratar de evitar sentirme mal por no poder disfrutar de leer de una buena lectura sin dejar que un contexto socio político o educacional o como quieran llamarlo, la "opaque". Y, aunque sabemos que estos eran conceptos generalizados y rara vez cuestionados, cuesta verlos translucirse en pequeños detalles, dado que hoy la lucha para modificar conceptos misóginos arraigados profundamente en la sociedad es más que palpable.

Una vez aclarada esta consideración podemos disfrutar de una lectura ligera y ágil que describe las sensaciones de Adán y Eva a medida de que descubrían el mundo que los rodeaba. Es inevitable pensar que el trasfondo de todo esto existe una gran crítica hacia el hombre civilizado que es portador de las más absurdas costumbres. Pero también es este hombre que aprendió a amar y que cambio todo el paraíso por una vida junto a Eva. Y como ambos aprenden a aceptar las características de la personalidad del otro y terminan amando hasta sus defectos.

Aunque quizás no lo parezca, no me considero muy moderna en cuanto a mis relaciones con los miembros del otro sexo, y por ende, mi relación es como "chapada a la antigua" y la división de tareas dentro de la pareja es la misma que se establecía hace 20 años. Por eso, puedo asumir que más de una mujer de mi generación no estará de acuerdo con lo siguiente. Eva termina deseando que, si algún día habrán de morir espera que sea ella primero porque su vida sin Adán estaría vacía y no tendría sentido. Pero Adán es fuerte y estará bien sin ella. Ahí se resume el amor. Y acá creo que, por lo menos a mi (y quizás a alguna otra loca suelta) me permite sentirme identificada con esa Eva, con esa primera mujer que se supone que somos todas y que es capaz de casi cualquier cosa por amor. Todas sus acciones anteriores me resultaron completamente ajenas. Igual si puedo discernir (y uds decidirán por uds mismos) luego de haber leído el libro, quien de los dos es más fuerte.
No se olviden de mirar los dibujos, mi edición era ilustrada por Francisco Meléndez y los dibujos eran el complemento perfecto con una gran cuota de sarcasmo.

Mark Twain
Libros del Zorro Rojo
España
2010
0 comentarios:
Publicar un comentario